Nuestro planeta es tan extenso y variado que afortunadamente nos aportan una riqueza cultural inapreciable. La sabana africana, las selvas de Malasia, la China milenaria, los brahmanes hindús, los grandes rascacielos de Norteamérica, la cultura colonial inca, maya o azteca; o la Polinesia Francesa o la gran barrera de coral de Australia son algunos de sus ejemplos.